Lleva a una cabra a pasar la ITV.
Ocurrio en la localidad madrileña de Almendralejo, un individuo de mediana edad apareció en el mostrador de la ITV con una carpeta y su documentación correspondiente. La secretaria al pedirle la documentación, sospechó al leer en el permiso de circulación, que la potencia del motor no venía especificada en caballos sino en litros de leche/día.
Tras quedar sorprendida al recibir la totalidad de la documentación, la secretaria no pudo menos que remitir a la cola de vehículos correspondiente al propietario de la misma.
Asomados a las ventanas de las oficinas, los empleados de las mismas contemplaron atónitos el esfuerzo que que el individuo tuvo que hacer para contrariar a la cabra, que prefería ir en la dirección opuesta.
martes, 19 de enero de 2010
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